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Equinoterapia
Equinoterapia es la utilización del caballo como herramienta terapéutica, es el conjunto de actividades que se realizan con el caballo y a caballo, se caracterizan porque ayudan a la rehabilitación y socialización de personas que presentan enfermedades o alteraciones discapacitantes a nivel físico, psíquico, sensorial y mental.
Los beneficios que se pueden obtener al recibir terapias ecuestres son:
• Motor: regulación del tono muscular, control del movimiento, favorece la destreza, favorece el desarrollo psicomotor, favorece o mejora el equilibrio, la coordinación, la postura y los patrones de desplazamiento como arrastre, gateo y marcha.
• Sensorial: fomenta la organización y modulación de los sentidos (Táctil, visual, olfativo, auditivo, propioceptivo y vestíbular) buscando la ejecución de respuestas adecuadas al medio según el estimulo.
• Cognitivo: favorece el aprendizaje, el desarrollo de los conceptos, aumenta los periodos de atención, incremento de la memoria.
• Socioemocional: dominio de si mismo, desarrolla el respeto, la paciencia, la responsabilidad, el incremento de tolerancia a la espera y frustración, aumenta la autoconfianza y autoestima, estimula la interacción social.
• Comunicativo: favorece la relajación de los órganos fonoarticulatorios, mediante posturas que permiten la regulación de la respiración y con ello se fomenta el desarrollo del habla y la comunicación; fomenta la espontaneidad verbal, mejora y aumenta la comunicación gestual y oral.
Los Adultos Mayores muestran gran afinidad por las sesiones de equinoterapia, interesándose en el contacto con el animal.
Es importante destacar que el hecho de que esta sea una terapia al aire libre es algo de suma importancia para quien la lleva a cabo, y que hace que la terapia se vuelva más una diversión que una actividad rutinaria, algo importante si tenemos en cuenta es que muchas personas que emprenden un tratamiento de Equinoterapia son niños o Adultos Mayores que pasan gran parte de su tiempo solos o con mínima compañía y pocas actividades.
Se ha descripto que la oportunidad de cuidar de un caballo, de su pelaje, alimentarlo, entrar en contacto con él sirve de mucha ayuda para las personas con la Enfermedad de Alzheimer, ciertos niveles de demencia senil, la Enfermedad de Parkinson, depresiones, Esclerosis múltiple entre otras.
Trastornos Generalizados de Psicosis y Síndromes asociados y Atrofia Cerebral entre otras patologías neurológicas, además está indicada en Trastornos Ortopédicos y Traumatismo en general; problemas Reumatológicos como: Artritis y Artrosis. También para enfermedades como Asma, Alergias, Estrés y Depresión.
El caballo no sólo produce el estímulo psicomotriz que ya hemos descripto. También le otorga a su compañero otro inmenso caudal de mensajes capaces de estimularlo desde otros aspectos:
• Perceptivos (olor, calor, contacto, sonidos, etc.)
• Orgánicos (masaje, movimiento)
• Psíquicos (compañía, seguridad, sostén, diversión, etc.)
También alimenta la relación del paciente con su compañero equino proponiendo otras actividades como su alimentación, el cepillado del pelo, la limpieza de los cascos, de los arneses... Un contacto que va más allá.
No cabe duda que se consigue superar el temor, mejorar la confianza y la capacidad de concentración; al tiempo que hace perder las tensiones e inhibiciones físicas y emocionales. Es por esto que la terapia ecuestre resulta efectiva no sólo con enfermos, sino también con personas que presentan problemas de inadaptación social.
Además contribuye a mejorar en:
• Discapacidad Visual.
• Discapacidad Física.
• Discapacidad Síquica.
• Discapacidad Auditiva.
No cabe duda que se consigue superar el temor, mejorar la confianza y la capacidad de concentración; al tiempo que hace perder las tensiones e inhibiciones físicas y emocionales. Es por esto que la terapia ecuestre resulta efectiva no sólo con enfermos, sino también con personas que presentan problemas de inadaptación social.
Resultados a corto plazo:
• Reducir los factores anormales del movimiento.
• Estimular la integración sensorial a partir de la sensibilidad táctica visual y espacial.
• Desenvolverse en la estructura témporo espacial.
• Favorece la modulación tónica y la fuerza muscular.
• Mejora los procesos básicos para el aprendizaje. (La Gerogogía re aprendizaje de los Adultos Mayores)
• Aumenta la autoestima facilitando la integración familiar y social.
• Estimula la efectividad a través del contacto y del vínculo que se establece con el animal.
• Estimula el uso del lenguaje oral y escrito.
• Aumenta la capacidad de independencia y toma de decisiones en situaciones simples y complejas.
• Promueve la sensación de bienestar motivando la continuidad del tratamiento y práctica lúdica.
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